El reciclaje de plásticos es una práctica cada vez más común en todo el mundo, ya que permite reducir el impacto ambiental de estos materiales y alargar su vida útil. Sin embargo, no todos los plásticos son iguales, y por lo tanto, no todos pueden ser reciclados de la misma manera. En el caso de las bolsas de plástico, hay algunas consideraciones importantes que debemos tener en cuenta antes de depositarlas en el contenedor de reciclaje.
En primer lugar, es importante diferenciar entre los distintos tipos de plásticos que se utilizan para fabricar bolsas. La mayoría de las bolsas de plástico que se utilizan en el día a día están hechas de polietileno de alta o baja densidad, que es un material bastante resistente y flexible, pero a la vez fácil de moldear y reciclar. Este tipo de plástico se identifica con el código 2 en el sistema de clasificación internacional de residuos (conocido como RIC, por sus siglas en inglés).
Por otro lado, también existen bolsas de plástico fabricadas con otros materiales, como el PVC o el polipropileno. Estos materiales suelen ser más duros y menos flexibles que el polietileno, y por lo tanto, su reciclaje es más complicado. En el caso del PVC, por ejemplo, es un material muy resistente y duradero, pero también muy contaminante, por lo que no es fácilmente reciclable. Por su parte, el polipropileno se utiliza sobre todo en bolsas de alta resistencia, como las que se usan en los supermercados para transportar botellas, pero su reciclaje es más difícil que el del polietileno.
En general, se puede decir que las bolsas de plástico que se pueden reciclar son aquellas que están hechas de polietileno de alta o baja densidad, y que llevan el código 2 en su etiqueta o en el material impreso. Estas bolsas plásticas se pueden reciclar junto con otros envases de plástico, como botellas, botes o tarrinas, y se transforman en nuevos productos plásticos, como tuberías, envases o mobiliario urbano.
¿Por qué es importante el reciclaje de bolsas plásticas?
Es importante seguir algunas recomendaciones básicas. En primer lugar, es fundamental limpiar las bolsas antes de depositarlas en el contenedor de reciclaje. Las bolsas que contienen restos de alimentos, aceites o líquidos pueden contaminar el resto de los envases y dificultar su reciclaje. Por eso, es recomendable lavar las bolsas con agua y jabón antes de tirarlas al contenedor.
Otra recomendación importante es no mezclar distintos tipos de plásticos en el mismo contenedor. Aunque las bolsas plásticas de polietileno se pueden reciclar junto con otros envases de plástico, no es recomendable mezclarlas con otros materiales como metales, vidrios o papeles, ya que esto puede dificultar su reciclaje y aumentar los residuos que acaban en vertederos.
Compra bolsas plásticas biodegradables, para cuidar el medio ambiente. Contáctanos al número 955061493 o al correo: ventas@plasticosalva.com (Visita nuestro local en: Av.union jicamarca, mz.v2 lt.3a sector este, Lurigancho – Chosica)